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Ya son 40 años desde que en 1978 una docena de deportistas terminasen una prueba de 3,8 kms de natación, 180 kms de ciclismo y un maratón de 42 kms en una sola competición pasando de una disciplina a otra de manera continua. Algo sin mucha relevancia en aquel entonces que ha pasado a ser una de las pruebas de larga duración de mayor afición y popularidad que hay en el panorama de los deportes de resistencia. La “Ironmanía” es una realidad que se extiende por todo el mundo llegando a tener que inscribirse en ellas con un año de antelación pues sus plazas se agotan en minutos e incluso segundos.

Completar un ironman® se ha convertido en el objetivo más alto de la temporada de una infinidad de triatletas cuyo objetivo es ser finisher bien sin más, bien mejorando sus marcas o bien consiguiendo la ansiada clasificación a la meca del triatlón, al lugar de origen, Hawaii con su campeonato del mundo en Kona.

Si estás en esta página y visitando esta web es que probablemente seas uno de ellos, un finisher o un aspirante a finisher. Si eres un finisher sabrás de lo que hablamos y si eres aspirante, ¡ojo! La distancia Ironman® y su hermano pequeño el 70.3, enganchan hasta el punto de convertirse en pasión y en estilo de vida. Y es por ello por lo que estamos aquí, para ayudarte en tu camino hacia tu objetivo, ya seas aspirante a finisher, un finisher que lo ha tomado como estilo de vida, un aspirante a sub10 o un competidor con proyecto “Road to Kona”.

Si Ironman® es tu reto, tu forma de hacer deporte, esta es tu página. Te ayudaremos a conocer la logística necesaria, a conocer las características de las pruebas, las marcas, las posibilidades de éxito, cómo elegir tu Ironman® e infinidad de detalles para que tu camino y experiencia sean disfrutados al máximo.

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En 1989 Dave Scott fue seis veces campeón de IRONMAN y Mark Allen, derrotado en sus intentos anteriores, un temido contendiente. Esta vez, sin embargo, todas las apuestas fallaron. Desde el principio, Mark se aferró a Dave con una intensidad que le dejó atónito.